Llevamos unos días un poco raros en cuanto al sueño de
Minerva. La semana pasada estuvo con fiebre un par de días, pero como vimos que
no iba a más y no tenía más síntomas no fuimos al pediatra. A partir de ahí ha tenido
algo de mocos, pero nada importante.
Y desde hace una semana mi hija ha decidido que eso de
trasnochar le gusta mucho más que acostarse a una hora decente, y no hablo de
las 12 de la noche sino de la 1 o las 2 de la madrugada. Además se despierta
cada hora a mamar, y los primeros días de esta nueva etapa lo hacía gritando
(hemos descartado terrores nocturnos porque es durante toda la noche y además
responde conscientemente a la pregunta de si quiera teta).
No sabemos muy bien a qué se debe este cambio, pero yo
estoy muy desconcertada y buscando mil y un motivos, porque sí, los niños se
despiertan y a veces les cuesta irse a dormir porque hay muchas cosas
interesantes que ver, pero así de repente, gritando por las noches, dando
patadas en la cama como si estuviese rabiosa por algo, y esas rabietas que se coge durante el día en las que es tal el sofoco que luego está media hora hipando... me deja
exhausta y descolocada.
Se me ocurre que le duela algo (lo dientes, ya pasamos
por eso alguna noche, pero era más el no poder dormir que el no querer dormir),
que tenga calor, que tenga miedo de irse a dormir (aunque sabe que estamos
nosotros junto a ella), que esté pasando por alguna fase de cambio en su
desarrollo…
Lo de estos últimos días me está superando, quizás
porque no descanso bien y tampoco desconecto. Mi ratito para mí es cuando se
duerme, desconecto, leo un poco, escribo, hago cosas pendientes, me dedico a mi
tiendita… pero últimamente no tengo eso y al cabo de unos días lo llevo
bastante mal. Lo necesito, necesito tener un rato para mis cosas, desconectar,
descansar. Y al final lo llevo tan mal, quizás egoístamente, que termino
comportándome muy mal con mi pequeña, gritándole, diciéndole cosas que no debo,
tratándola bruscamente… Se que en algún momento todos hemos caído en este
torbellino emocional con nuestros hijos, incluso esos padres tan tranquilos que
parece que jamás se alteran, pero lo de estos días ya es demasiado y no me
siento nada bien conmigo misma y la situación.
Mi hija siempre ha sido muy demandante, yo acepto que
es así, de lo contrario no sería mi hija, y lo veo normal. Pero quizás por el
cansancio de estos días ya no llevo tan bien ciertas cosas. Si ella no tiene
ganas de desayunar, comer, merendar o cenar, tampoco me deje hacerlo a mí
(especialmente el desayuno, y no me extraña después de tanta teta, a veces opto
por no esperarla si me he levantado antes y me da tiempo), porque tengo que
irme con ella a jugar, faltaría más; que la siesta, excepto alguna vez que me ha sorprendido, siga sin hacerla seguida, tres cuartos de hora ella
solita y otros tres cuartos de hora (mas o menos) con mamá tomando teta, y casi
12 kilos ya cansan bastante (podría echarme con ella, pero no me iba a dormir y
prefiero aprovechar ese ratito a hacer mis cosillas frente al ordenador); por
la noche cuando se duerme, cuando se dormía a una hora decente, de 9 a 11, según la temporada,
tengo que volver a acostarme con ella o cogerla para darle teta en ocasiones
hasta tres veces hasta que me voy a dormir yo también; podría madrugar por la
mañana para aprovechar mientras duerme, y a veces lo hago aunque no haya dormido
nada, pero normalmente en cuanto me levanto su radar hace que también se
despierte ella, aunque se haya acostado a las tantas. Tengo muy claro que lo
primero es mi hija, y si no puedo hacer otras cosas pues ya se harán, pero he
de reconocer que necesito un poco de espacio para mí sola un rato al día.
No quiero con esto dar pena, ni mucho menos. Yo soy el
adulto, y debería comportarme como tal, aunque muchas veces termine
sumergiéndome de lleno en la rabieta de mi hija en vez de ayudarla manteniendo
la calma y estando a su lado para lo que me necesite. Pero realmente es
difícil, al menos yo lo siento así, y más en momentos como estos cuando de
entrada no estamos al 100%. Me da rabia dejarme llevar por esa maraña de furia
emocional, y no comportarme como mi hija necesita y se merece, porque ella es
la niña, la que necesita aprender a comprender y canalizar sus emociones, a
través de mí. Y en vez de comportarme como el adulto que la acompaña, sale la
niña que llevo dentro con todos sus fantasmas.
Con esto sólo quiero desahogarme y mostrar que estas
cosas pasan, para bien y para mal. Aunque soy consciente de todo esto, a veces
no me basta para salir de esa espiral, pero el hecho de relatarlo me ayuda a
reflexionar más profundamente y a iluminarme sobre los puntos de mi
personalidad que tengo que trabajar para hacer crecer a la niña dolorida y enfurecida
que llevo dentro.
Eso sí, cuando me mira con esos ojitos picarones y me
da esos abrazos que más pareciera una “lapilla” enganchada a mí, se me pasan
todos los males.
Tú lo has dicho, amiga, "estas cosas pasan,..." Paciencia y desahógate, de momento se me antoja que es lo mejor que puedes hacer y para eso estamos :) ¡Y no te sientas culpable! eres mamá, pero sigues siendo Carol (y eso, no es nada malo)
ResponderEliminarUn placer leerte, guapi.
Besitoss a los cuatro
Muchas gracias Aroa, se que siempre podré desahogarme contigo para lo que necesite, sabes que es mutuo.
EliminarUn abrazo guapa
carol, es cierto lo que escribis y creo que a todas nos pasa. o por lo menos a mi y a vos! je! a veces pienso QUE ALGUIEN ME SAQUE DE ACAAAAAA!!!! jajajaja.
ResponderEliminaresta bueno reconocer que podemos cansarnos tambien como mamas, aunque seamos adultos, nos cansamos, es asi. necesitamos desahogarnos y seguir adelante, no? esta buenisimo tener este espacio para poder escribir todas estas cosas y renovarnos para estar otra vez con las peques.
te mando un abrazo lleno de energias!!!
Eso pensaba yo, quiero irme lejos de aquí...
EliminarMe ha venido bien desahogarme, la verdad, creo que he cogido incluso fuerzas.
Un abrazo
Claro reina, puedes y debes quejarte y desahogarte, desde luego que son rachas, pero cómo cansan hasta que terminan, y temes perder la paciencia, salirte de tus casillas etc. Te entiendo perfectamente, y lo bueno de ésto es que no te dejas llevar, tratas de que no afecte a la peque y sobrellevarlo. A veces apetece acurrucarse y que te mimen verdad? En fin, mucho ánimo preciosa, cuando menos te des cuwnta se normalizará. Un abrazo!!
ResponderEliminarEso quiero pensar, que son rachas que pasan. Y es verdad que en ocasiones me da miedo mi reacción cuando me veo muy saturada, entonces intento alejarme un poco para respirar hondo.
EliminarUn abrazo
Carol
ResponderEliminar¡te entiendo perfectamente! Yo pasé por un par de meses así y estaba absolutamente agotada y desesperada ¡es duro! Cada día me repetía “todo pasa, recuerda que todo pasa”… ¡pero mientras hay que pasarlo! En fin, paciencia contigo y con ella y aquí estamos para acogerte también en tu desahogo.
Abrazos acunadores
Muchas gracias Magia. Eso me digo, que todo pasa, aunque a veces se hace duro mientras tanto.
EliminarEl saber que todas mas o menos pasamos lo mismo me tranquiliza un poco.
Abrazos acompañados
Carol, ese torbellino emocional lo conozco, no es algo que puedas erradicar como si fuese un gato de tu terraza, es algo con lo que hay que convivir, pero poco a poco se va consiguiendo. Lo importante es que te desahogues y puedas ver que a muchas o quizás a todas nos ha pasado. Fuerza y mucha paciencia (uy, mira quien habla!).
ResponderEliminarSaludos.
Desde luego que no es algo que pueda hacer desaparecer, es algo que tengo primero que aceptar y luego que trabajar.
EliminarTienes razón, el saber que a la mayoría nos pasa hace que lo vea con más optimismo.
Muchas gracias.
Besitos
Carol, un gran abrazo, lo que te ocurre es totalmente comprensible y creo que todas nos sentimos así en determinados momentos en los que las situaciones, ya conocidas y aceptadas, nos pueden sobrepasar. Aunque sea duro, a veces, estas circunstancias resultan bonitas al ayudarnos a encontrarnos. Te mando gran cariño y comprensión para que te sientas acompañada.
ResponderEliminarMuchos besos!
Creo que siempre se aprende de las adversidades, y esto sin duda me enseña mucho sobre mí, y sobre cómo enfocar las cosas.
EliminarMuchas gracias guapa, contigo es fácil sentirse acompañada.
Un besazo
Me siento completamente identificada. Las sierras de 45 minutos, los mil despertares nocturnos... Estoy agotada pero al menos ella se acuesta sobre las 8 o las 9 y puedo hacer cosas entre sus despertares. Creo que puede ser por las muelas pero no tengo certeza. Lo bueno es que de vez en cuando duerme mejor y descansamos. Mucho ánimo. Seguro que pronto duerme mejor y ves las cosas con otro color. Un abrazo enorme y eres una madre estupenda. No es malo necesitar un ratito para ti!!!
ResponderEliminarComo se suele decir, mal de muchos consuelo de... en fin, que el saber que hay mas familias en la misma situación me reconforta, porque me reafirma que es totalmente normal y que pasa.
EliminarUn abrazo
Me siento totalmente identificada, en todo y también necesito tiempo para mi. Es bueno sentirse acompañada.
ResponderEliminarBesos y ánimos.
Gracias por tu acompañamiento!
EliminarUn abrazo
Carol, ayer mismo estaba escribiendo en el trabajo una reflexión para mi blog que trataba de cuando las ganas se interponen en el camino de nuestros instintos... a mi muchas veces me pasa lo mismo con XImena, con la fibromialgia a veces es un trecho duro de superar y me dan ganas de apartarla a un lado y seguir a lo mío pero siempre me pongo a pensar si es lo correcto, no sé, siempre me da por pensar y ver si esa reacción es la que se lleve Ximena y la que se le quede en la retina mientras yo esto yeen el trabajo, respiro hondo y... bueno, todo se pasa.
ResponderEliminarEspero que esta estapa se pase pronto o que encuentres el motivo (sin llega a la locura) y puedas capear la situación.
Animo.
Si a veces ya es duro, no puedo imaginarme cómo debe ser cuanto tu cuerpo físicamente no te responde como quisieras.
EliminarA mi tampoco me gustaría que se llevase esa imagen, aunque en ocasiones sea lo que desearía hacer, desaparecer.
Muchas gracias Diana.
Besitos
Carol, preciosa, bien sabes que te entiendo a la perfección. Conozco la mala sensación que le queda a una cuando la situación nos supera y perdemos las riendas momentáneamente. Podemos tomarlo como ina oportunidad para crecer, para conectar con esa niña que no sabe ser la madre que somos. Mientras pasa la esta racha y encuentras de nuevo tu tiempo aqui estamos.. para acompañarnos. Un abrazo fuerte!
ResponderEliminarNo dudes de que me siento muy acompañada, porque me siento comprendida y apoyada por todas vosotras. Sin duda intento que esto tenga una finalidad, y es aprender, siempre aprender para seguir avanzando.
EliminarUn besazo
Carol, leerte ha sido como ver etapas de mi vida reciente en vivo y en directo. Como tú bien dices, en el fondo creo que todas estas actitudes de nuestras peques no son más que una somatización de la falta de atención que les damos cuando nos enfrascamos demasiado en otros proyectos... Y es que a veces pensamso que ya son mayores, que hacen muchas cosas por si mismas y que incluso juegan solas... pero una cosa es que lo hagan por decisión propia y otra por obligación porque ya no estamos disponibles para ellas. Y por las noches nos reclaman más porque para dormir necesitan esa seguridad de que estamos ahí, velando por ellas.
ResponderEliminarA mi lo que mejor me funciona en esos momentos es dejar todo de lado y tener un par de días buenos de más dedicación a mis nanos y luego parece que todo fluye mejor y las aguas vuelven a su cauce.
Un abrazote.
Esa idea también pasó por mi cabeza, pero no la tuve muy en cuenta porque para mí no había cambiado nada, sin embargo puede que para mi hija si.
EliminarGracias por tus palabras, creo que es lo mejor que puedo hacer.
Un besazo
Después de leer todos los comentarios de las demás mamis, digo lo que iba a decir con razón: TODAS NOS HEMOS SENTIDO ASÍ ALGUNA VEZ.
ResponderEliminarSeguro que todas hemos perdido los nervios en alguna ocasión y hemos pensado, ¡dios, ojala estuviera sola!
Es normal sentirse así, sobre todo cuando no has dormido, estas enferma, o simplemente estas cansada.
Somos humanas, somos imperfectas. Mi madre lo hizo conmigo, y yo lo he hecho alguna vez con mi hijo. ¿Qué luego me arrepiento? Por supuesto..... PEro que le voy a hacer....
Pero sabes que? Estoy segura que ellos no nos lo tienen en cuenta ;)
Por supuesto no somos perfectas, y está bien que sea así, además me reconforta saberlo. Pero siempre procuro intentar ser mejor madre y mejor persona.
EliminarUn abrazo
A veces los niños tienen esas rachas donde se altera "la normalidad" y nosotras nos volvemos locas pensando en los posibles motivos. Mi peque lleva una semana despertándose también sobre las 2 de la madrugada aunque normalmente lo pasamos a nuestra cama y se duerme, sin jaleos. Hasta hace poco dormía todo seguido pero trato de no darle importancia y paso los días esperando a que acaben esos madrugones. Tu caso es distinto, es normal que te preocupes si tu hija se levanta gritando y es perfectamente normal que con la falta de sueño también estés cansada. Te mando muchos ánimos y el deseo de que esa racha acabe pronto. Besos
ResponderEliminarGracias Yaneth!
EliminarSin duda son rachas, que siempre pasan, espero que esta se pase pronto. Y lo haremos lo mejor que podamos.
La verdad es que me ayudan un montón vuestra palabras de ánimo.
Un abrazo
Palabra por palabra te comprendo y me veo reflejadas mis vivencias, tu ya sabes que pasará, que es perfectamente normal y que tienes todo el derecho del mundo de quejarte y volver con rabia sobre los acontecimientos y que habrás aprendido y crecido. Aún así te mando toda mi empatía, mi apoyo y mi cariño. Un beso muy grande cielo!
ResponderEliminarMuchas gracias por tu apoyo!
EliminarSe que son rachas, pero cuando estás ahí metida de lleno parece que no va a pasar nunca. Hoy hemos estado mejor, espero que la cosa vaya mejorando.
Un besazo
Qué te puedo decir que no te hayan ya dicho las otras madres y que no sepas tú misma...
ResponderEliminarLa verdad es que me he visto reflejada en lo que has expuesto, episodios así he tenido en el pasado con mi peque, incluso lo de las rabietas en medio de la noche que creo que algo te comenté en tu post sobre los terrores nocturnos, en mi caso dudo de que fueran terrores tipificados como tales.
Mucha paciencia y mucho ánimo, que son rachas que como vienen se van y luego como si nada hubiese pasado.
Echa mano de la tribu (abuelos, tíos, amigos) para desconectar algún rato que en estas ocasiones falta nos hace. Parece que por ser madres especialmente involucradas en la crianza lo pasamos peor cuando nos damos cuenta de nuestras propias debilidades pero tenemos que asumir que no somos infalibles.
Un abrazo, comadre!
Una rabieta durante el día puede llevarse, pero por la noche... es desconcertante.
EliminarEl recurrir a personas cercanas sin duda es necesario a veces, sobre todo para retomar fuerzas y salir del bucle.
Un besazo
No te sientas mal, es normal que a veces perdamos la paciencia y estemos irritables, sobre todo si estas cansada, agotada y llevas noches sin dormir. Ya lo han dicho más de una vez: no somos perfectas. El peque también ha tenido algunas noches asi de levantarse gritando, llorando y no querer que lo coja, ni que lo suelte, ni de pie, ni tumbado... Creo que son terrores nocturnos, o los dientes o que se yo, pero la unica solución es pasarlo y mañana será otro día amiga...
ResponderEliminarUn beso y fuerza!!
Lo que no llevo bien es el poder hacer daño a mi hija con mi actitud, aunque no ningún ningún problema en pedirla perdón.
EliminarTerrores nocturnos o pesadillas se que no son, pero lo que si se es que antes o después pasará.
Un abrazo
Hola Carol,
ResponderEliminarNur tiene ahora 2 años y un mes, y tiene días, semanas, en los que se comporta de forma extraña también. Aunque respeta mucho sus horas de sueño, su comportamiento a veces también me sobre pasa y me ha hecho mucho bien leerte, ver que hay otras madres que lo están viviendo....
Por lo que cuentas parece que hay muelas de por medio. Los colmillos, en concreto, mueven mucha ira y gritos, toda la energía del hígado que provoca esto. estoy segura de que lo estás haciendo bien. Poniendo la conciencia que podemos en cada momento. Con amor. Aprendiendo... Un besito
Noraya
"El Rumor de las Libélulas"
Es bueno y bonito ver como en este tribu nos ayudamos unas a otras con nuestras experiencias.
EliminarCuando empezó todo le mire la boca pero no vi nada, a ver si me deja y vuelvo a mirar. Gracias Noraya!
Un abrazo
Carol entiendo y comparto tu inquietud, ya sabes que lo hemos hablado mas veces, creo que es normal sentirnos que no estamos al 100% con nuestras pequeñas en algunas circunstancias, y eso me crea una sensacion, por lo menos a mi, muy insegura de saber que no lo estoy haciendo bien y por otro lado en el momento no poderlo evitar, aunque luego me arrepienta..... y mucho,y este un rato pidiendole perdon hasta que creo que me ha entendido.
ResponderEliminarEllos por su parte creo que entienden tambien nuestras circunstancias o "rabietas " como lo quieras llamar y a su manera creo que se ponen en nuestro lugar e intentan comprendernos.Paciencia amiga (suelo presumir de serlo)aunque muchas veces es la que a mi me falta, una cosa que me eseña mi pequeña cada dia.
Muchos BSSSS
Pues yo estoy segura de que lo estás haciendo requetebien. Pedir perdón cuanto te equivocas es lo más acertado que podemos acerca.
EliminarUn fuerte abrazo Penélope
Un abrazo. Espero que las cosas vuelvan pronto a la normalidad. ;)
ResponderEliminarGracias Zary, yo también lo espero.
Eliminarque mami tan real contando que también te desesperas, que le alzas la voz a tu niña, que te agotas...que realidad.
ResponderEliminary parece que nunca pasamos por momentos como estos, verdad?
has hecho muy bien en compartir estos momentos, te felicito, no todo es siempre tan perfecto como leemos, en general.
En cuanto a loq ue le pasa a Minerva, lo de la noche yo apunto más aque sean los dinetes o terrores, son las dos cosas que más he vivido con Maria, y estaban las patadas `presentes y se retorcia en su cuna...como la niña del exorcista, eso con terrores, y con los dientes son gritos...llantos y mucha rabia...pero claro, es normal por el dolor.
Lo de los horarios de acostarse, lógicamente a mi parecer, también influye, ahora hace más calor, así que también les cuesta más dormir,por eso yo soy tan amiga de su rutina a la hora del sueño, siempre la acuesto dentro de la misma franja de horario, de 9 a 10. Cuando me paso...la cago, doy fe.
espero que Minerva se adapte a su horario, que desaprezcan esas malas noches que está pasando(y tu también) y que por fin puedas recuperar tus momentos, que son tan necesarios, de verdad.
un besazo
Normalmente compartimos lo bueno, porque realmente es lo que más pesa, nuestros hijos lo pueden todo. Pero creía necesario y además necesitaba desahogarme, contar que a veces también hay momentos duros.
EliminarPor ahora no le veo ningún diente que tenga pinta de querer salir. No se. Los terrores nocturnos si que los hemos descartado porque las "rabietas" nocturnas se producían durante toda la noche.
Nosotros nunca hemos seguido unas rutinas, pero si es verdad que procuramos cenar siempre a la misma hora y prontito para que luego se duerma tranquilamente. No hemos cambiado eso, así que no entiendo muy bien lo que ha pasado. Quizás el calor tiene algo que ver, al fin y al cabo nos afecta a todos.
Por la noche la cosa parece que va volviendo a la normalidad, y en cuanto a la hora de dormir, todavía se duerme algo tarde, pero al menos no llega a la una de la noche :S
Un abrazo
Carol, no sabes cuánto te entiendo y cuánto agradezco leer que a veces no todo es color rosa... a veces siento que necesito despegarme un poco de Gabriel, aunque yo trabajo fuera de casa y debería sentirme menos cansada, pero no. Lo que trato es recordarme a mí misma, al igual que tú, que yo soy la adulta y él, el niño, pero también se sale mi niña interior que quiere hacer berrinches y patalear igual que mi hijo!
ResponderEliminarUf... bueno, nosotros tuvimos una temporada similar, no tanto en la noche, en realidad duerme bastante bien, pero también quería seguir despierto cuando yo ya estaba desesperada porque durmiera (no puedo dormir hasta que él se duerme, porque a veces se levanta), así que me desesperaba, me enojaba, eso hacía que él se enojara también, y era un círculo vicioso de no parar. Hasta que quien paró fue yo (como debió ser desde el principio), y cuando notó que yo estaba más paciente y cariñosa, como por arte de magia, volvió a ser el niño lindo.
Ánimo, linda, seguro que es una etapa (tuya y de ella). Abrazos
:D
Nos viene bien desahogarnos de vez en cuando y reconocer que no siempre todo es tan bonito.
EliminarY tienes razón, no es hasta que nos relajamos cuando ellos pueden entonces también relajarse y todo fluye y vuelve a la normalidad.
Muchas gracias Bere!
Un abrazo
Ufff, que emocion leerte y leer todos estos comentarios. Me pasa igual y termino muy enojada conmigo misma cuestion que no aporta nada. Al menos sabiendo que a todas nos pasa igual, me siento, mas normal jajajja
ResponderEliminarEs bueno ver que son situaciones en las que nos vemos inmersas todas, al menos consuela, verdad?
EliminarUn abrazo
Entiendo perfectamente como te sientes. Como te hemos dicho todas, a mí me sucede más a menudo de lo que me gustaría, y la vergüenza, el malestar y el dolor en el pecho que siento después de haberme enfado con mi pequeño duele tanto que pienso: "¿así es como quieres ser una buena madre??". Luego le pido perdón mil veces y le abrazo entre mis brazos hasta que me protesta para que le deje seguir gateando.
ResponderEliminarMi hijo también es muy demandante, yo con nueve meses, aún no he conseguido dejarle en la cuna, ni en ningún lado para dormir (sólo pido una siesta, las noches dueme con nosotros), tiene que quedarse en brazos y si lo intento se despierta completamente...anhelo algo de tiempo para mí misma, para pasarlo con mi pareja, pero me resulta completamente imposible. Lo tengo asumido, y me contento pensando que pasará, y que luego echaré de menos tenerle dormidito en mis brazos, pero ahora...me siento atada, y cuando a esto se le une una mala racha, como la que tú tienes ahora...llega la desesperación, y el perder los papeles.
Pero como siempre, luego me mira con esos ojillos tan vivos, y esa sonrisa que me derrite, y todos los pesares se esfuman...como si hubiesen sido parte de un mal sueño. Yo me consuelo pensando que, está creciendo tan rápido que todo el tiempo que pase con él es poco...así que en estos momentos de crisis...miro sus fotillos de recien nacido, respiro hondo (pido ayuda a papá) y de vuelta...
Mucho ánimo, Carol.
Al menos somos conscientes de que no hacemos bien y pedimos perdón. Lo ideal sería trabajar sobre este aspecto nuestro para que no llegue a suceder, aunque lógicamente no somos perfectas y en ocasiones perdemos los nervios.
EliminarPor lo que veo es igual que mi hija a esa edad. Tienes toda la razón, aunque a veces nos agobie luego echaremos de menos el tenerles encima pegaditos, así que aprovechémoslo porque esto pasa y ya no volverá.
Muchas gracias!